Dolor en el cuello o en las cervicales, tortícolis frecuente, dolores de cabeza, el culpable puede estar en su cama... ¡justo debajo de su cabeza!
Una mala almohada o una almohada mal adaptada obliga al cuerpo a ajustar su posición a lo largo de la noche, por lo que el sueño no es profundo ni reparador.
Elegir una almohada no es tan sencillo, entre todos los modelos que hay en el mercado, las hay blandas, firmes, rectangulares, cuadradas, almohadas de materiales naturales o sintéticos, ¿cómo elegir la que más te conviene?
Encontrar la almohada adecuada te asegurará un sueño tranquilo que te permitirá despertarte ¡sintiéndote genial!

Una almohada adaptada a sus necesidades

Además de la comodidad que le proporciona al dormirse, la almohada debe respetar su morfología y su postura preferida para dormir.
Si tienes articulaciones más bien flexibles, tu almohada debe respetar la movilidad de tu cuello, elige una almohada blanda que permita que tu cuello se mueva y no lo obligue a permanecer en una posición fija.
Por el contrario, si tu cuello es más bien rígido, elige un soporte firme para evitar tensiones musculares.

¿Qué tipo de almohada debo elegir?

En función de su morfología y de su postura al dormir, puede optar por una almohada ergonómica o una almohada clásica.

La almohada ergonómica

Suele estar hecha de espuma viscoelástica que se ablanda al contacto con el calor corporal. Suele ser pesado, pero se mantiene en su sitio mientras duermes y es adecuado para las personas que duermen de lado o boca arriba, y especialmente para las que no se mueven mucho mientras duermen.

La almohada de fibra ecológica

Más ligera y móvil, la almohada "clásica" puede comprimirse o aplanarse según sus necesidades. Las almohadas de plumas son de excelente calidad y ofrecen una esponjosidad excepcional. También puede elegir una almohada con relleno de material reciclado. Para regular bien la temperatura, opta por una almohada con funda de Tencel™ Lyocell, que regula la temperatura de forma natural y limita la sudoración nocturna.

Máxima higiene para un sueño más saludable

Para garantizar un sueño perfectamente sano y natural, elija una almohada garantizada sin ningún tratamiento químico, ¡para evitar dormir sobre pesticidas toda la noche!

Para una higiene perfecta, elige una almohada con funda desenfundable que puedas lavar regularmente. Mejor aún, proteja su almohada con una funda protectora de algodón orgánico, ¡una forma excelente de evitar las manchas de sudor y de mantener su almohada tan limpia como el primer día!