La cama es la parte más importante de la habitación del bebé, ya que al nacer duerme entre 12 y 16 horas al día. Aunque el bebé duerma a veces en su cochecito o haga la siesta en su hamaca, es fundamental que pase el mayor tiempo posible en su propia cama. La cama, con un colchón de calidad , permite una posición más cómoda para dormir y garantiza una mayor seguridad.

Una cama de bebé que cumple las normas

Por desgracia, la cama también ostenta el triste récord de accidentes domésticos para los niños pequeños. Por tanto, es imprescindible informarse antes de comprar una nueva cuna y, sobre todo, comprobar que cumple las normas de la NF.

Para los aficionados a los muebles antiguos o para los padres que recuperan una cuna que perteneció a sus abuelos, es importante saber que, aunque estas camas antiguas suelen tener mucho encanto, no siempre cumplen las normas de seguridad actuales.

Los barrotes de las camas deben estar a menos de 6 cm de distancia, y el espacio entre el somier y la parte superior de la cama debe ser de al menos 66 cm para evitar cualquier riesgo de caída. Lo ideal es que la cama tenga un somier extraíble que pueda bajarse a medida que el bebé crece para evitar que trepe por la barrera y se caiga.

En cuanto a las pinturas utilizadas en las cunas, debes asegurarte de que sean pinturas sin disolventes, que sean seguras para los niños y que no se desprendan, ya que los bebés suelen morder el borde de la cama...

Un colchón firme para el bebé y un saco de dormir para un sueño seguro

El colchón del bebé debe ser firme y su tamaño debe ser idéntico al de la cama para que se adapte exactamente a los contornos de la misma sin que quede ningún espacio vacío.

Si es posible, elige colchones de materiales naturales y colchones con certificado OEKO-TEX® que garanticen que no contienen ninguna sustancia química, para que tu bebé duerma más sano y mejor. Los colchones sin tratamiento químico evitan todas las emisiones tóxicas durante el sueño.

Los edredones y las almohadas no deben usarse antes del año de edad. Es preferible utilizar un saco de dormir para limitar el riesgo de asfixia.

Si el bebé se duerme con su "caniche", asegúrate de no utilizar un cordón para sujetarlo, ya que es demasiado peligroso en la cama.

Los peluches grandes también están prohibidos en la cama del bebé; es preferible retirar todos los peluches de la cama y mantener sólo un peluche pequeño. Si has optado por decorar la habitación de tu bebé con un móvil, asegúrate de que no esté colocado encima de la cama, ya que podría herir al bebé si se cae.