Cuando se trata de cuidar al bebé, a menudo pensamos en su dieta y en la calidad de su sueño, pero no en su entorno. Aquí tienes algunos consejos sobre cómo organizar la habitación del bebé protegiéndolo de diversos tipos de contaminación. Estas recomendaciones están agrupadas en una guía titulada Bienvenue bébé (Bienvenido bebé) publicada por la Agence de l’environnement et de la maîtrise de l’énergie (Ademe)

Limitar la contaminación interior en la habitación del bebé

En primer lugar, para limitar la contaminación interior, es importante no utilizar velas, incienso o productos domésticos perfumados en la habitación del bebé y, sobre todo, ventilar la habitación todos los días, incluso cuando hace frío. Para renovar el aire, basta con ventilar la habitación del bebé durante 10 minutos.
Es aconsejable preparar la disposición de la habitación y su decoración antes del nacimiento del bebé para que las pinturas y los disolventes contenidos en los muebles tengan tiempo de evaporarse. Lo ideal es terminar el dormitorio antes del sexto mes de embarazo y ventilarlo todos los días antes de la llegada del bebé, para que los compuestos orgánicos volátiles (COV) tengan tiempo de evaporarse. Seleccione pinturas y muebles con etiqueta A+ para contaminantes

Productos ecológicos para el aseo, la ropa y el sueño del bebé

Al lavar a tu bebé, es aconsejable utilizar lo mínimo en cuanto a productos de higiene, principalmente agua, o productos con etiqueta ecológica. Limitar las lociones y leches que suelen ser irritantes para la piel sensible.
Para la ropa del bebé, es aconsejable favorecer los materiales naturales, el Algodón Orgánico, el lino o la lana, que son más sanos y mucho menos alergénicos que los materiales sintéticos. Es importante comprobar que los tejidos no están tratados químicamente, ya que "la piel de los bebés es más frágil pero también más permeable a las sustancias químicas".
Esto también se aplica a los colchones y la ropa de cama, con los que los bebés estarán en contacto durante más de 12 horas al día durante los primeros meses: los colchones, las sábanas bajeras, los sacos de dormir ylos pañales deben estar hechos de materiales naturales y se garantiza que no están tratados químicamente.
Para los juguetes y peluches, es aconsejable elegir entre una gama de Algodón Orgánico y lavable y, a medida que el niño crece, favorecer los juguetes de madera. Deben evitarse los juguetes de plástico, especialmente los perfumados, ya que emiten compuestos orgánicos volátiles nocivos


Limpiar la habitación del bebé con productos de limpieza ecológicos

Para la lavandería y la limpieza del hogar, el uso de productos naturales y ecológicos garantiza un entorno más saludable. Parece que los niños que viven en hogares donde se utiliza mucho la lejía son más propensos a desarrollar infecciones respiratorias

Prepara tu propia solución limpiadora natural mezclando 1 litro de agua, 1 cucharada de vinagre blanco, 2 cucharadas de bicarbonato de sodio, añade 4 gotas de aceite esencial de árbol del té, 3 gotas de aceite esencial de limón y 3 gotas de aceite esencial de romero.