Cuando preparas la habitación para tu futuro bebé, quieres que todo esté bonito, nuevo, ordenado, sano y puro; ¡pero lo mejor es que todo siga limpio incluso después de la llegada del bebé!

Optar por un nuevo colchón es esencial para mantener una buena higiene y limitar el riesgo de alergias. Pero para mantener ese precioso colchón en perfecto estado, es imprescindible protegerlo con una funda de colchón. Sin esta protección, el nuevo colchón de su hijo se manchará rápidamente con los pequeños accidentes de la vida del bebé (fugas de pañales, vómitos, etc.), pero también con los anillos causados por la transpiración excesiva, especialmente en la cabeza.

Si elige una funda de colchón impermeable y transpirable, protegerá el colchón contra la humedad y, por tanto, contra la aparición de bacterias y moho. Esto mantiene el colchón como nuevo durante más tiempo y proporciona a su hijo un sueño más saludable.

La funda de colchón permite, por tanto, alargar la vida del colchón, muy útil para los colchones de bebé, ¡también es imprescindible para proteger los colchones junior queacompañarán a sus hijos durante una buena decena de años!

Las mejores fundas de colchón son las que no contienen PVC, sino una fina capa de poliuretano. Más silencioso y transpirable, a menudo se combina con algodón de cultivo ecológico o TENCEL™™, que son materiales naturales especialmente suaves al tacto.

Asegúrate de elegir una sábana bajera con esquinas redondeadas para que se mantenga perfectamente en su sitio aunque el bebé se mueva mucho. También debe ser lavable a máquina para facilitar su cuidado.